Principis de tardor
Javier Molinero
Bernat Ivars
Juanjo Oller
FALLA AL CENTRE DEL CARME CULTURA CONTEMPORÀNIA
Una extensa red de asociaciones teje durante todo un año la celebración que supone la vida en la ciudad de València. Es la suma de todos estos esfuerzos la que hace posible las Fallas. La certeza de que la unión hace la fuerza nos ha llevado a diseñar una dinámica de talleres donde cientos de niños desde los 6 hasta los 93 años han aportado sus creaciones, cuidadosamente estampadas en 2.400 hojas de madera. Mágicamente las hojas de los árboles del claustro se transforman en las escamas de un dragón formado por 18 módulos de madera pensados para optimizar el uso de este noble material que garantizará una cremà menos tóxica. Porque allá por el solsticio de verano arderá para cerrar el ciclo*.COR EN FLAMES
Després d’un parell de visites als fallers en el seu casal, sopar dels divendres, entrepà i cerveseta, comencem a conéixer-nos. Escoltem i parlem. En aquestes visites anem trobant petits tresors amagats. Triem un d’aquests tresors que és la passió d’aquesta falla per la festa, per la celebració i volem fer-li un homenatge en forma de cor.
És un cor molt gran, un cor descomunal que representa aquesta passió per celebrar. Celebració amb foc, cor en flames.
La Bauhaus consiguió llevar objetos de nuestra cotidianidad a otro plano, aunando artesanía e industria con arte. De este modo estos artistas se convirtieron en diseñadores (Marcel Breuer, Josef y Annie Albers, Marcel Brandt, Wilhelm Wagenfeld,…) se le daba un valor especial al prototipo que era la pieza creada por las manos del artista (no por la industria) y que se tomaba como modelo para la producción.
En los talleres de la Bauhaus estos diseñadores, tejieron, trabajaron el metal, la madera, el vidrio, y otros materiales con sus propias manos.
Este espíritu de la Bauhaus, donde juego y trabajo se armonizan, donde cada pieza es importante en un mismo engranaje, donde todos los esfuerzos van en una misma dirección, es el que nos ha llevado a Javier Molinero, Bernat Ivars y Milimbo a la construcción de un gran cuerpo serpenteante que habitará durante un mes en el claustro Renacentista del Museo del Centre del Carme en València. Esta gran serpiente formada por un esqueleto de 18 modulos de madera articulables y cubierto de una piel de escamas/hojas es nuestra falla. Para la creación de esta piel hemos creado unos talleres de estampación, donde unas 15 escuelas de la ciudad nos han ayudado a tejer esta gran serpiente. Hemos convertido el Museo en nuestro própio taller y los niños han podido ver y tomar parte de este proyecto desde el inicio, siendo testigos en todo momento del proceso. Para los talleres de estampación hemos creado un gran alfabeto de símbolos utilizando sellos de caucho, que los niños han utilizado como si se tratáse de la misma escritura. De este modo han podido escribir y dibujar sobre las hojas/escamas de esta gran piel, creando sus própios mensajes o grafías, creando una verdadera partitura infinita. Así paralelamente hemos ido creando un gran libro/serpiente, un libro infinito entre todas las escuelas que han participado, donde unos símbolos dialogan con otros armónicamente, creando un mismo ritmo o música.
A los niños les hemos hablado y mostrado el trabajo que hicieron artistas como Annie Albers, Stepanova, Popova… y que nos han servido como fuente de inspiración. El tejido, la trama y la urdimbre como símbolo de lo social, del trabajo participativo…